Hacerse sabio debe de tener algún problema como casi todo, pero el principal posiblemente sea saber lo poco que sabes, auqnue habría que añadir el de que tu nivel de exigencia aumenta de forma desmesurada.
De joven nos satisface cualquier cosa, parece que ante el conformismo de la juventud valga todo, cualquier carencia se transforma en una estrategia de marketing de un producto o servicio para jovenes. Vacaciones compartiendo habitación, comidas incomibles, bebidas "garrafón", transporte masificado, cualquier tipo de sufrimiento con un buen slogan es algo que resulta maravilloso para quien no conoce otra cosa.
Un "robado" en el sexo, era lo más, acababa de salir de mi adolescencia y era lo único que podíamos hacer sín un sitio donde planteártelo con tranquilidad, auque tampoco sabía más. Ahora me doy cuenta que todavía soy un apasionado, pero he perdido todo aquello. Necesito tiempo y comodidad, necesito ambiente, estimulación, y por supuesto ninguna prisa.................... ¿Me estaré haciendo sabio, o es que ya soy mayor?
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